“Un espacio no cobra vida por su forma, sino por quien lo habita.”
En cada proyecto, mi prioridad no es imponer una estética, sino escuchar a las personas que van a vivir, trabajar o respirar ese lugar.
El diseño emocional parte de una premisa sencilla: el espacio debe hacer evolucionar a las personas de quienes lo regentan o lo habitan.
Por eso, antes de dibujar una línea, converso. Pregunto. Observo.
¿Qué necesitan? ¿Qué les calma? ¿Qué les inspira? ¿Qué les hace sentir paz o alegría o felicidad?
Solo así el diseño deja de ser decoración y se convierte en experiencia.
Cuando el espacio se conecta con las personas, ocurre algo poderoso:
La casa se vuelve refugio
El local se vuelve identidad
El templo se vuelve silencio
Y eso —esa conexión invisible— es lo que hace que el diseño tenga alma.
¿Tienes un proyecto y no sabes como incluir el diseño emocional para poder darle alma?
¿Qué te hace sentir en paz en tu hogar?
FrAncisco SilvÁn CorrAl – adi@arquitecturadeinterior.com – Diseñador de Interiores
Blog – www.ArquitecturaDeInterior.com –
“diseño centrado en el usuario”, “arquitectura emocional”, “espacios con alma”.
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